5. “El retrato de Bernardo de Gálvez”
El temor hacia este cuadro se ha difundido de tal manera, que los visitantes del Hotel Gálvez, lugar donde se encuentra la obra, le piden permiso a la misma para contemplarla. Dicen que sino lo haces la maldición que rodea a la pintura caerá sobre todos que se atreven a verla sin el permiso.
