3. Entusiasmarse muy pronto
Este movimiento en la mejora del autoestima comenzó con los llamados “Baby Boomers” (aquellos nacidos entre 1946 y 1964), la regla de que “cada niño recibiera su trofeo” comenzó a debilitarse cuando éstos comienzan a darse cuenta que los únicos que piensan que son fabulosos son mamá y papá, y que nada tiene que ver con la realidad.
Con el tiempo, un niño así aprende a hacer trampa, exagerar y mentir para eludir alguna verdad incomoda, por eso no estará preparado para afrontar las dificultades en su vida de manera adecuada.