La discriminación y el racismo es algo que aún existe, sin embargo, es una actitud tan antigua y retrograda que la gente debería comprender que ya no debería suceder en ninguna parte del mundo y bajo ninguna situación. Pero hay personas que quieren demostrar lo contrario de una forma admirable. Anna Christine Larson es una fotógrafa y madre que ha elaborado una hermosa y creativa serie de imágenes llamada “Barely Different” (Apenas Diferentes) que va a enternecer y cautivar tu corazón.
Anna es madre de dos hermosas nenas, una biológica y una adoptada en Etiopía hace 5 años.
En sus fotografías logra capturar el gran amor y la increíble conexión que tienen las pequeñas Semenesh y Haven.
Estas pequeñas son amigas inseparables, pasan horas y horas corriendo por ahí y jugando juntas.
Anna consideró la adopción tras un tiempo de voluntariado en Haití donde conoció y cuidó de una niñita que desgraciadamente falleció. Fue así como decidió que era el momento de traer un miembro más a su familia.
Estas hermosas fotografías muestran el gran vínculo y amor existente entre las hermanas. Tal y como Anna dice: “Tienen un creciente lazo que une sus almas; crea una importante conexión y un gran entendimiento la una con la otra.”
“Nuestra intención era mostrar al mundo esta conexión de amor a través de acciones, no de imágenes.”
El sentido de conexión no es más fuerte debido a su color de piel. Lo sorprendente de ello es el hecho de haber nacido en lados opuestos del mundo y ser de madres diferentes. Son seres únicos, con personalidades muy distintas, pero a pesar de todas las diferencias existen enormes similitudes entre ellas. Esa similitud está plantada en sus almas. Una gran conexión que nació del amor”
Anna comenzó a fotografiar a sus pequeñas hace 2 años. Ella dice que este trabajo siempre fue personal, nunca tuvo intensión de que se volviera viral, pero el hermoso lazo de amor que existe entre las niñas no podía pasar desapercibido.
En estas fotografías en blanco y negro, pretende mostrar las similitudes que hay entre estas pequeñas de diferente origen e ignorar todas las diferencias. A pesar de todo, no son tan diferentes como parecen.
Gracias a la adopción y al amor de una madre, se han unido dos pequeñas inseparables.
No podemos negar que estas dos niñas son hermosas.
(Fuente: Anna Christine Larson)
Los niños parecen ser los únicos que no conoce de límites o etiquetas, no ven colores, edades, capacidades ni tamaños. Estas fotos reflejan que pese a las diferencias, el amor nos da la capacidad de crear lazos y similitudes aunque a simple vista no existan. Estas pequeñas son hermosas y nos dan un gran ejemplo de hermandad y amor.
Todos debemos ser más tolerantes e inclusivos, por eso comparte este lindo ejemplo.