El exitoso debut de la película inspirada en el cómic anti-héroe de Marvel, ha vuelto a hacer noticia, después de que uno de los actores del electo tuviera un amable y noble gesto con un cine de Utah, Estados Unidos.
Todo comenzó luego que una de las salas del cine, llamado Brewvies vendiera cerveza a los asistentes en plena función de la película. Pese a que en el estado, la venta de alcohol en los cines es legal, la normativa prohíbe la distribución y venta cuando la cinta que se esta proyectando muestre escenas de actos sexuales o desnudez.
Por esta normativa, el cine habría cometido una grave violación a la ley, el vender bebidas alcohólicas en la proyección de Deadpool, aún cuando tuviera los permisos para la venta de alcohol y que la cinta haya sido calificada para mayores de 18 años, ya que el protagonista de la película muestra en reiteradas ocasiones actos o simulaciones de relaciones sexuales con la contraparte femenina, además de tener escenas de sexo-montaje, según lo que señaló el informe señalado por los agentes que asistieron a la función de manera incógnita.
Pero el actor Ryan Reynolds, quien encarna al popular anti-superhéroe, no se quedó en silencio, y a través de las redes sociales quiso manifestar su molestia, de la forma que solo él sabe hacerlo… lleno de ironía y sarcasmo, escribiendo en su “famosa cuenta de Twitter: “Gracias a Dios, han encontrado una forma para legislar la diversión”
Thank god, they’ve found a way to legislate fun. https://t.co/vUSptxaHb9
— Ryan Reynolds (@VancityReynolds) 24 de abril de 2016
Pero no solo eso, ya que luego de que el cine Brewvies habilitara un sitio en la página GoFoundMe para recaudar fondos y así costear su defensa legal, el actor decidió donar 5 mil dólares y así apoyar la causa.
Hasta el momento, el cine ha logrado reunir 19 mil 500 dólares en donaciones.
Reynolds demuestra una vez más que su heroísmo no solo es parte de sus películas, sino que también de su vida diaria.
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