El perro se llama Gorgi, y ahora es famoso en todo el recinto. Él entró hace un año a la comisaría presentaba signos de maltrato cuando llegó a la comisaría de Bayamón Puerto Rico, además se veía gravemente desnutrido.
Cuando apreció todavía era un cachorro y aunque se notaba que había sido maltratado, él era un perro alegre y agradecido con los humanos.
Así fue como los oficiales decidieron darle asilo y alimentarlo, aunque en un principio él cachorro se negaba.
Gracias a que Gorgi debía ir todos los días a la comisaría para que le dieran de comer, en poco tiempo todos se habían encariñado con él, así que decidieron recolectar dinero para llevarlo al veterinario.
Cuando el médico les confirmó que el perro estaba en buenas condiciones de salud, los oficiales se dieron cuenta de lo útil que sería en la estación y lo convirtieron como parte de su equipo.
El cambio fue notable en Gorgi, en poco tiempo era ya otro perro, gracias a los cuidados de sus compañeros y amigos.
Además de darle un hogar, también le dieron trabajo, ahora es el guardián de la comisaría.
Para que nadie dude de su profesionalidad, Gorgi tiene su propia placa y chaleco, las cuales usa durante su jornada de trabajo.
Y cuando su turno en la comisaría termina, Gorgi disfruta su tiempo libre jugando y luego se va a casa junto a su compañero, un policía que decidió adoptarlo.