La belleza no es siempre igual y perfecta, sino que son los detalles los que hacen que seamos únicos e incomparables. Esto, bien lo sabe la bailarina canadiense de 22 años, Cassandra Naud, quien nació con una gran mancha en el lado derecho de su rostro, debido a una enfermedad llamada hipertricosis.
Como es de suponer, al crecer vivió siendo blanco de desagradables burlas en la escuela, lo que le afectó profundamente en su autoestima, pero que hoy entiende que es algo que la hace diferente y especial.
Al crecer, su mancha lo hacía también, siendo cada vez más y más profunda en sus capas de la piel, por lo que la cirugía era la única opción para eliminarla, pero sus médicos le advirtieron a sus padres, que podría tener grandes cicatrices e incluso, perder su ojos derecho, si se operaba.
Por suerte, esta chica renunció a esta idea y hoy es una mujer mucho más feliz consigo misma. Es hermosa, talentosa y con una confianza que muchos envidian. En Instragram, ya cuenta con más de 19 mil seguidores.
“La gente de a poco, aprende a disfrutar de sus particularidades. Los tiempos han cambiado y yo ya no siento que debo preocuparme tanto por mi apariencia. Nunca dejes que los comentarios negativos te afecten y siempre siéntete orgulloso de quien eres”.
Tras terminar la secundaria, Cassandra estudió teatro y danza en la Academia de Drama de Los Ángeles y ha sido parte de musicales y otras producciones.
Hoy, ella llama la atención por su talento y no por sus diferencias ¡No dudes compartir esta inspiradora nota!