Ketan Aggarwal, es un hombre de 30 años que viven en Londres y sufre de Autismo. Él, tiene una vida bastante activa y asistía al gimasio Virgin Active, hasta que un día el instructor de su clase de spin, se dedicó toda la jornada a ridiculizarlo, por lo que este chico decidió enseñarle que eso no está bien.
Por esto, pasó 2 años estudiando Derecho de manera autodidacta, con ayuda de libros de biblioteca y fuentes en línea, para finalmente llevarlos a juicio, el que felizmente ganó.
Los incidentes ocurrieron en mayo del 2015, jornada en la que Ketan fue llamado varias veces estúpido por el personal acusado y también fue regañado de forma muy maleducada para que cambiara la música que sonaba. Este chico, puso un reclamo oficial, el que fue ignorado por la compañía, lo que finalmente lo llevó a poner la demanda.
Ketan, se presentó a sí mismo ante el juzgado y logró conseguir la victoria, lo que le significó una compensación de 1390 libras y una disculpa por escrito de Virgin Active, además del despido del instructor en cuestión.
En sus propias palabras, “cuando alguien discrimina a alguien por una discapacidad mental nunca esperan que esta tome la vía legal, ni ponga una demanda.” “Fue genial ganar”.
Él Ketan Aggarwal, un hombre autista el que fue llamado “estúpido” en repetidas ocasiones por el instructor de spin gimnasio al que asistía
Es por esto, que el londinense de 30 años decidió demandar a Virgin Active, luego de que su reclamo fuera ignorado
Luego de esto, pasó 2 años estudiando derecho de forma autodidacata en bibliotecas y fuentes online
Aggarwal, se presentó a sí mismo ante el juzgado y logró demostrar que había sido discriminado
Tras su victoria, la corte impuso a Virgin Active el pago de una compensación a este chico de un total de £1,390
La corte, también ordenó que la compañía entregara una disculpa por escrito, y eso es realmente lo que Aggarwal esperaba
“Lo que esperaba no era el dinero…” declaró públicamente, pero añadió que “fue genial ganar”
Sin dudas, el triunfo de este chico, es el triunfo de todos, ¿no? ¡No olvides compartir esta inspiradora nota!