Muchos países están preocupados y creando políticas y medidas, como las restricciones de tráfico, con el fin de reducir la contaminación. Pero, no solo se debe trabajar en las carreteras, se pueden encontrar soluciones otras áreas, como por ejemplo, en la arquitectura.
Un excelente ejemplo de ello es el edificio del arquitecto Vincent Callebaut que se “come” la contaminación. Es la torre llamada Tao Zhu Yin Yuan, que comenzó a construirse en 2013 y desde setiembre formará parte del conjunto de edificios emblemáticos de Taipei, Taiwán.
Su diseño será helicoidal y tendrá 101 metros de altura, así que no se parecerá a la torre Taipei, que con sus 508 metros, es uno de los rascacielos más altos que existe en el mundo.
Se destacará por albergar aproximadamente 23.000 árboles y arbustosen las paredes interiores, exteriores y en los suelos de sus 40 apartamentos de lujo. La misma cantidad que tiene todo Central Park.
Se calcula que estas plantas podrán absorber 130 toneladas de dióxido de carbono al año, equivalente a lo que generan 27 vehículos.
Sin embargo, eso no es todo lo que este edificio hará por el medio ambiente.
Según declaraciones del arquitecto en Council on Tall Buildings and Urban Habitat (CTBUH), tendráun sistema de reciclado de aguas lluvias, ascensores de bajo consumo eléctrico, placas solares y un sistema para ahorrar energía en función del clima.
Esta no es la primera propuesta arquitectónica que intenta absorber la contaminación. Existe otra en Milán y se llama Palazzo Italia. Este edificio, purifica el aire con el material con el que está construida su fachada.
Excelente que sigan surgiendo ideas para proteger nuestro medioambiente. Comparte esto.