La sala de operaciones es un lugar secreto, como el cónclave del vaticano, donde solo los “elegidos “ pueden ser testigos y tomar parte de el procedimiento que se esta realizando.
Ethel Easter es una mujer estadounidense a la que le debieron hacer una operación, tras descubrirle una hernia en la zona abdominal. Pero al encontrarse en la sala de operaciones dejó una grabadora encendida, para así conocer los detalles de su operación, mientras ella era intervenida. Ethel nunca pensó que el trato que le darían los profesionales de la salud, mientras ella era operada, sería tan denigrante y ofensivo.
La mujer, quien habría ido un mes antes a la consulta del doctor en el hospital Houston Lyndon B. Johnson, por un fuerte dolor abdominal, tuvo una disputa no menor con su médico, quien había determinado que la hernia hiatal alojada en su abdomen sería extirpada dentro de 2 meses. Ethel le explicó que el dolor era demasiado intenso y no podría esperar hasta dentro de dos meses, lo que desató la ira del profesional quien le recriminó: “Bueno, ¿quién te crees que eres? Tendrás que esperar como todos los demás”. Esto habría llevado a la mujer desconfiara del procedimiento y pensara lo peor, por lo que escondió una grabadora para registrar los momentos que ella anestesiada, no fuera consciente de lo que estaba pasando en la sala.
Si bien, los profesionales no hicieron daño físico a su cuerpo, las burlas y denigraciones hechas por quienes, se suponía, cuidarían de ella y respetarían su cuerpo, fueron algo que nadie se lo esperaba. “fue una discriminación racial, me sentí ofendida” declara la mujer.
Burlas por su ombligo, comparaciones con la protagonista de la película “Precious” entre otras pesadeces fueron parte de las conversaciones mientras ella, desnuda y anestesiada ponía su cuerpo y vida en mano del equipo médico.
A continuación te dejamos la historia para que escuches todo con mayor detalle.
Si bien, Ether no quiere una compensación monetaria, por lo tanto no demandó a los médicos, solo quiere que le pidan las disculpas respectivas.
Creemos que no podemos juzgar a todos los médicos de la misma forma, pero al menos estos, no tenían mucha vocación de servicio con sus pacientes. ¿Qué opinas tu?
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