Hace poco, el jurado de Nottingham en el Reino Unido, declaró culpable a una pareja de adolescentes de 14 años por el brutal asesinato ejecutado a Elizabeth Edwards, de 49 años y su hija de 13 años.
En el mes de abril, una joven le propuso a su pareja matar a Edwards, quien trabajaba en el comedor donde la pareja estudiaba, según fuente del diario El Mundo, España.
El día que ocurrió el doble asesinato, la pareja llego a la casa de las víctimas en el pueblo de Spalding, condado de Lacanshire.
Elizabeth fue apuñalada al menos en 8 ocasiones por el joven, mientras ésta dormía, y la niña de 13 años la acuchilló dos veces y después la ahogó con una almohada.
Luego de asesinar a madre e hija, los adolescentes se ducharon y sacaron la sangre de las víctimas, después tuvieron relaciones sexuales en la cama y vieron la saga completa de Twilight, según información de la versión británica de The Guardian.
Por su parte, la defensa del joven admitió los crímenes, mientras que el abogado de la adolescente argumentó que ella sufría de problemas psiquiátricos, mostrando que días antes había escrito en su diario de vida: “Ayúdame. La muerte es el único camino. La locura está en mí”.
Sin embargo, el psiquiatra forense que evaluó el caso afirmó que la joven sufría un grave trastorno emocional al momento de indagarse los hechos, más que sufrir una enfermedad mental.
El médico también destacó que la relación que mantenían los adolescentes posibilitó el horrendo crimen “Una dinámica de grupo puede llevar a una acción que nunca contemplarías por tu propia cuenta. Bonnie y Clyde (…) Ese tipo de atracción intensa, (…) ellos contra el mundo. Es ese tipo de cosa lo que llevó a esto”.
El juez que estuvo a cargo del caso, dijo que este era uno de los casos más horribles que le había tocado en su carrera y el próximo mes estaría leyendo la sentencia de los asesinos.
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