En India, un consejo tribal de la aldea de Jawalwadi determinó que la niña de 13 años, quien fuera violada por su padre, merecía recibir 5 latigazos como castigo.
El consejo justifica su sentencia puesto que el padre de la menor se encontraba en estado de ebriedad al momento de cometer el abuso contra la pequeña, además de que la niña se habría negado a que su padre cumpliera su cometido, en primera instancia.
Para cumplir con el castigo, la menor fue amarrada y luego golpeada por una rama de árbol en 5 oportunidades, el cual fue grabado por los testigo del brutal acto de “justicia” local.
Sachin Tukaram Bhise, el padre quien habría ingresado al cuarto de su pequeña hija en estado de ebriedad luego de asistir a una boda el pasado mes de enero, violó a la menor. Así lo admitió, por lo que ha sido acusado por la policía india por tratarse de un delito.
Pese a que parezca lo más brutal, en muchas comunidades rurales de la India suele castigar a las mujeres que son víctimas de violaciones, además de ser obligadas a casarse con sus victimarios para “remediar” el problema.
Dilip Jadhav, uno de los organizadores de la “condena” contra la menor, explicó que si una de sus hijas fuera violada, sería obligada a casarse con el hombre, sin haber denuncia o condena para el victimario.
“No se denuncia. Si se lleva a las niñas a la Comisaría, todo el mundo descubre qué ha pasado y se convierte en un problema más grande. Es mejor casarlas” – Afirma Jadhav.
Pese a que los consejos tribales tienen prohibido realizar este tipo de castigos, por el máximo organismo judicial llamado Tribunal Supremo de la India, los consejos continúan realizando sentencias como esta.
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