Franco Banfi es un fotógrafo que se dedica a capturar y conocer a las más impresionantes bestias salvajes.
Una vez cuando viajó a Sudamérica se encontró con la sería la anaconda salvaje más grande del mundo, le impactó tanto su tamaño que decidió acercarse, sin ningún miedo, a sacarle unas cuantas fotos.
Acercarse demasiado a una criatura de este tipo es arriesgarse a que te estrangulen y te coman, pero el fotógrafo había visto que la serpiente ya se había comido bastante y pensé que tal vez ya no tendría interés en él.
Juntó fuerzas y se atrevió a acercarse para tocarle la cabeza a la gran serpiente.
Cuando estuvo lo bastante cerca como para sacar unas impresionantes fotografías, se percató de que la anaconda tenía más miedo de él que el miedo que el mismo hombre sentía. Así que tuvo la oportunidad de disfrutar el gran momento y capturar un sin fin de imágenes.
Gracias a su gran valor y pasión por la fotografía pudimos apreciar esta inmensa criatura, la anaconda más grande en estado salvaje.
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