Scott Van Zyl, un conocido cazador sudafricano de 44 años, desapareció hace unos días mientras iba en un zafari. La policía de ese lugar comenzó la búsqueda y al encontrar sus huella marcadas en el camino hacia el río Limpopo en Zimbawe concluyeron que algo malo ocurría.
Al llegar al lugar le dispararon a varios cocodrilos ya que sospechaban que alguno de ellos podría habérselo comido.
Scott tenía dos hijos y trabajaba para una compañía que se dedicaba a cazar par sus clientes extranjeros.
En el momento de su desaparición él y el conductor del vehículo del safari habrían estacionado en un campamento y luego caminaron en direcciones opuestas. A Scott lo acompañaban perros de caza, quienes ese mismo día regresaron al campamento solos. En ese momento supieron que algo malo había sucedido.
Fue así como un grupo de rescate llegó al lugar y también amigos del hombre desaparecido ayudaron en su búsqueda.
La policía sospechó que un cocodrilo pudo habérselo comido y al dispararle a varios y luego abrirlos, encontraron restos humanos que aún están siendo analizados para confirmar que pertenecen al cazador.
En lo que va del año ya han habido 4 muertes causadas por cocodrilos y esto se debe a que por las recientes lluvias que han producido inundaciones, el caudal del río sube y acerca a los reptiles a las áreas residenciales.
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