Cosas como estas, no deberían ocurrir. El día más lindo de la vida de una mujer (que quiere ser madre, claramente) es el día, en el que finalmente sus sueños se ven materializados en un pedacito de cielo que nace de sus vientres y desde ese momento, se transforma en el motor de sus vidas.
Tener un hijo, debe ser un motivo de celebración, pero para esta joven madre de 24 años de edad, el día más feliz de su vida, también se convirtió en el día más triste de todos, pues mientras daba a luz, su prometido y su madre, morían camino al hospital.
¡Una terrible noticia!
Crystal Matrau-Belt, De 24 Años, Estaba Dando A Luz A Su Hijo Jeremiah, Mediante Una Cesárea, El Pasado Sábado En Michigan, Estados Unidos. Estaba Muy Feliz, Pero Preocupada Por El Retraso De Dos Personas Muy Importantes En Su Vida, Su Prometido Y Su Madre.
Lamentablemente, Lo Que Ignoraba La Pobre Crystal, Es Que En El Mismo Momento En El Que Ella Daba A Luz, Su Novio Emil Skokan De 34 Años Y Su Madre Peggy Nichols, De 53 Años, Morían En La Carretera, Camino Hacia El Hospital.
Fue Tanta La Emoción Y La Rapidez Del Conductor, Que La Policía En Primera Instancia, Cree Que La Causa Del Accidente, Sería La Alta Velocidad De Conducción.
Esta Chica, Recibió La Noticia Por Parte De Su Padrastro, 3 Horas Después Del Nacimiento Del Pequeño Bebé. Ella Afirma Que Este Es El Mejor Y El Peor Día De Su Vida, Porque No Se Puede Imaginar Sin Ellos.
Todos Lo Que La Conocen, Le Dan Apoyo Y Le Piden Que Sea Fuerte, Pues Saben Que Ese Bebé La Necesitará Más Que Nunca.
Créditos: dailymailuk
¡Qué terrible! Realmente, me moriría de pena si algo así me sucediera, esperemos que esta chica pueda tener la fuerza y el apoyo necesarios para poder salir adelante junto a su bebito.
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