El brote de este virus esta dejando estragos en la población infantil española, especialmente a la ciudad de Cataluña. El brote sería de enterovirus, un microorganismos pertenecientes a la familia de virus de la polio y otros más de 60 serotipos que provocan infecciones respiratorias o gastrointestinales de carácter leve.
Este virus ha sido el más agresivo que se había registrado, dejando a una pequeña con fuertes daños motrices que la mantienen tetrapléjica. Solo puede mover la cabeza, apenas puede hablar y respira por medio de ventilación mecánica.
La niña comenzó con síntomas de bronquitis, y rápidamente comenzó con síntomas severos de alteración neurológica. El virus le provocó romboencefalitis, que es una inflamación aguda del tronco cerebral y mielitis (hinchazón a la médula espinal), por lo que fue trasladada al Instituto Guttmann, un centro de neurorehabilitación.
“La menor es consciente de todo, ya que sólo tiene afectación motora“, dijo a los medios locales el doctor Joan Vidal, responsable de la unidad de lesionados medulares del instituto.
Pero ella no es la única afectada, sino que hasta el momento ha habido cerca de 40 niños menores de 6 años, que han sido afectados por el virus, dejándolos con daños neurológicos. Al menos 9 de ellos estuvieron o esta en la unidad de cuidados intensivos, aunque están teniendo a una evolución favorable.
“La preocupación de los médicos es que estas infecciones no deriven en encefalitis” comentan los del ministerio de salud.
Lo que en verdad preocupa es que hasta el momento no existen vacunas ni tratamientos efectivos contra el enterovirus. Pero una forma de prevenir son:
- frecuente lavado de mano con agua y jabón de al menos 20 segundos.
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar
- Evitar el contacto cercano con personas que estén enfermas
- Taparse la boca con pañuelo de papel cada vez que haya tos o estornudos
- Limpiar y desinfectar las superficies tocadas normalmente.
- Evitar salir cuando se esta enfermo
La transmisión se transmite via oral-fecal o a través de secreciones respiratoria, es por eso que pese a que el virus afecta también a los adultos, los niños son quienes sufren los peores síntomas.
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