A veces podemos pensar o sentir que somos víctimas del destino o de la suerte, y es que nos pueden pasar algunas cosas que son tan insólitas como tontas que no nos la podemos esperar ni muchos prever.
En algunas ocasiones es un “Fail” tan grande que fácilmente puede llevarse la paciencia de cualquiera y aunque gritemos lloremos o nos desesperemos, lo mejor es pasar la página y asumirlo como un “mal día”.
Vomito

Se cayó el helado ¿se imaginan el olor?
Se le olvido que estaba allí al estacionarse

Trizas de celular, o lo que queda de él

Para endulzar el asiento

Pequeña nevada

Lavadora en llamas

Al parecer tembló

No colocaron aviso de cemento fresco

Quería entrar en la playa

De revés

Trapeando, ¿en qué año terminará?

¿Cuál fue tu favorito?
Comparte ese mal día tú también



