Para un padre que espera la llegada de su hijo, no hay experiencia más espectacular que presenciar el parto del ser que tanto ama y tanto ha esperado. Pero no todo es expectación y alegrías, ya que tanto para un padre, como para la madre, pueden ser capaces de experimentar miles de emociones y sensaciones en el momento que la madre es preparada para el gran momento.
Sin duda, la madre es quien juega el papel de protagonista, ya que es quien hará el esfuerzo físico mayor, por lo que la presión, el miedo y el dolor están presentes. Pero el padre también posee una ardua tarea.
Para demostrarte que el parto no es solo una difícil tarea para la mamá, te mostramos estas 10 cosas que le ocurren al padre en el momento de la llegada de su hijo.
- Sensación de Ansiedad
¿Llegaremos a tiempo al hospital? ¿Podrán aguantar? ¿cuánto tiempo tenemos? ¿qué hago ahora?. Si, es verdad que el padre no es quien sufre las terribles contracciones, pero la ansiedad que puede llegar a experimentar un padre durante los momentos previos al parto podrían ser equiparables al dolor que está sintiendo la madre, ya que todo esta dependiendo de su actuar en ese momento.
- Angustia y Temor
¿Quién no tendría miedo de dejar la vida de los dos seres que más amas en las manos de desconocidos? Pese a que esos desconocidos sean médicos, nada asegura que todo vaya a salir bien.
- Impotencia y frustración
Estas viendo que no hay forma de aliviar los dolores de tu pareja y al mismo tiempo no puedes hacer nada para ayudarla a hacer todo más fácil. Estas atrapado y atado de manos. Muchos padres, incluso, experimenta una sensación de culpabilidad por el momento de dolor.
- Nerviosismo extremos
La incertidumbre se apodera del momento. Solo un padre que esta esperando el nacimiento de su hijo podría entender hasta que grado los nervios se apoderan de él. Ese es el momento en el que su mente comienza a crear infinitos desenlaces y pensamientos que los hacen actuar de una forma que es poco normal ver en ellos.
- Mareos y desmayos
No en todos los casos puede ser igual, pero la mayoría de los padres experimenta una sensación de mareos o incluso vómitos, ya que la presión es tanta, que se refleja de manera física. Por esto mismo, muchos padres han optado por tomar terapias y prepararse antes de un parto, así poder sentirse capaces de soportarlo.
- Miedo por lo que se viene
¿Seré buen papá? ¿y si lo hago mal? Sin duda, estas preguntas han aparecido en innumerables oportunidades durante el embarazo, pero es en el parto donde se le toma más peso a la responsabilidad que se les viene, sobretodo al ver a ese pequeño ser que dependerá de ti por muchos años.
- Soledad
Todos se preocupan por la mamá y el nuevo miembro de la familia, pero el padre generalmente esta solo con miles de sensaciones poco conocidas y pensando en todo lo que esta ocurriendo. En esos momentos, un abrazo o un apretón en el hombro no le sentaría nada de mal.
- Asco
No es por el momento en sí, sino que en ese instante el padre esta tan sensible, ansioso y presionado que puede llegar a experimentar los síntomas del embarazo, nuevamente. Por eso cualquier olor, cualquier alimento puede hacerles perder la compostura y enviarlos directo al baño.
- Alivio
Cuando ya el hijo nace y esta todo bien, el padre puede sentir cómo sus músculos se relajan, como si hubiera recibido una dosis de la mejor medicina relajante. Ya el cargar a su pequeño en brazos es una clara señal de que todo ha salido bien y no hay mejor terapia que esa.
- Orgullo
Por fin todo ha terminado y resultado con éxito, por lo que el momento para comenzar a disfrutar a su bebé ha llegado. No podría sentirse más pleno, esperanzado y feliz, puesto que ya es padre y pudo sobreponerse a esas miles de sensaciones vividas en las pasadas horas.
Si tienes que acompañar a una pareja al momento del parto, ya sabes que el padre también necesita sentirse apoyado, puesto que no puede ser el fuerte todo el tiempo.
¿Has sentido todo esto? Comparte con tus amigos que son padres.
