Todos los días se nos ataca con imágenes de guerra, desastres naturales, asesinatos sin sentido, el racismo y un sinnúmero de otras consecuencias de que nosotros los humanos simplemente no nos llevamos bien entre nosotros. Tal vez deberíamos aprender una lección de nuestros parientes más salvajes que han superado sus instintos animales básicos y ponen sus diferencias a un lado, todo en nombre del amor.
“No te preocupes, nadie puede vernos.”
“El pequeño cachorro de color rosa es el mío.”
¡Abrazo de grupo!
La pareja perfecta.
Destinados a estar juntos.
“Dame un beso”
Los instintos maternales son profundas.
Perro y gato… los mejores amigos.
Bueno… una patata no es una especie, pero esto era demasiado adorable como para dejarla pasar.
Deben estar enamorados.
Una alianza improbable.
La historia detrás de cómo estos dos se conocieron es una que me gustaría escuchar.
La cabeza más cómoda en kilómetros a la redonda.
Este lagarto le encanta acurrucarse… y a su amigo gato no parece importarle en lo más mínimo.
El amor lo conquista todo.
Cuando nadie está mirando…
“Quiero que este momento dure para siempre.”
“Yo lo trato como uno de los míos. ¡No importa lo que piensen los demás! “
Y, por último, parece que estos dos están tomando el vínculo entre el ser humano y el caballo a otro nivel.
Después de todo, no importa la piel, garras o plumas que tengan en el exterior, es lo que hay en el interior lo que cuenta. Queda más que demostrado que todos podemos ser amigos… si ellos ya lo hacen ¿Por qué no nosotros? Ya es hora que dejemos de lado las diferencias, el racismo, las peleas y amemos más inocentemente, como los animales.
Para que circulen más imágenes de amor, comparte estas tiernas imágenes.