La cebolla es uno de los alimentos que más consumimos ya que, aunque sea cruda, frita o cocida intensifica los exquisitos sabores de nuestras comidas. Sin embargo, la peor parte y la que todos queremos evitar es la parte de picar. Al tener un alto contenido de azufre, cuando la manipulamos este elemento se vuelve más ligero y como nuestros ojos son sensibles, segregamos lágrimas para mitigar el ardor. Hay tradiciones o datos que ayudan a prevenir esto. Pruébalos tu mismo.
Ten un pulverizador a mano y rocía frecuentemente la zona donde estamos picando la cebolla. Esto hará que se humedezca el ambiente y la reacción sea más sutil.
Antes de picarla, intenta mojar la cebolla con agua fría.
Otra opción es poner un tazón con agua a lado para que el ambiente se mantenga húmedo.
Mete las cebollas al refrigerador o congelador unos minutos antes de picarlas.
Moja con vinagre el filo del cuchillo antes de picar la cebolla.
Puedes encender una vela y ponerla cerca de donde estás picando o encender el extractor de la estufa y colocarte debajo.
También puedes picar la cebolla dentro de un bowl con agua.
(Fuente: kiwilimon)
No dejes de utilizar este rico alimento que le da sabor a tus comidas y solo evita que el picar cebolla y llorar sigan siendo sinónimos en tu cocina. Prueba estas fáciles técnicas y llora solo de felicidad al crear un rico plato.
Evita las lágrimas de tus amigos, compartiéndoles estos datos.