Este es Ryan Clarke, un joven de 24 años que vive en Nueva Escocia, Canadá. Él pesaba alrededor de 173 kg, causando una fuerte depresión, ansiedad y sufría continuos dolores en su pecho y problemas de salud, debido a su obesidad.
Después de constantes visitas al doctor, su médico le dijo algo que lo hizo ver la gravedad de su problema, “Si sigues por este camino, estarás muerto a los 30 años” una simple frase que lo hizo tomar conciencia… Era tiempo de hacer un cambio.
“Si no vive hasta los 30, nuestros hijos ni siquiera lo recordarán. Así que despertó un día y dijo suficiente, es suficiente” Comenta Alyssa Clarke, la esposa de Ryan.
El joven hizo una real transformación, pero no fue fácil. Comenzó a ir al gimnasio dos veces al día y reformó completamente sus hábitos alimenticios. “Fue súper duro, porque la gente se quedaba mirándolo” dice Alyssa.
Así con perseverancia y mucha, pero mucha fuerza de voluntad pudo bajar 83 kg en solo 10 meses.
“Habían días donde se sentía sin ganas de ir (al gimnasio), entonces yo le decía, Si que irás” cuenta Alyssa. Y así es como comenzó a tomar forma su lema de vida: “No puedo parar, no voy a parar” (Can´t stop, won´t stop)
Cada mañana realiza una rutina de cardio, antes de marcharse a continuar sus estudios de técnico jurídico. En la tarde vuelve al gimnasio por una hora y media de entrenamiento con pesas.
Incluso ha superado a su grupo de amigos, eligiendo rodearse con personas que lo sigan motivando.
Así, ahora Ryan y Alissa caben en su antiguo pantalón de 122 cm de diámetro.
No solo sus medidas han cambiado, sino que él ha cambiado su forma de ser y pensar, mejorando su salud mental. “El esta más aquí, ahora de lo que estaba antes, mentalmente sabio de lo que era 10 meses atrás” comenta Alyssa. “Siento que me casé con un hombre completamente distinto”
Y sí que lo hizo.
Ryan no deja que nadie perturbe su vida, pese a su baja de peso lo ayudó de sobremanera, el tiene piel suelta, como recordatorio de su antiguo peso. En un video publicado en Facebook, él comenta que es consciente de eso, pero no se dejará deprimir por nadie. Él trabajó duro por esto.
Actualmente, Ryan quiere ser inspiración para que otros puedan hacer su mismo cambio, utilizando sus cuentas de Facebook e Instagram. Todos los cuerpos son distintos, pero él quiere que todos sepan que pueden lograr un cambio si se lo proponen.
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