La crueldad humana no tiene límites. Esta vez, la víctima fue un perrito Staffordshire llamado Indy al cual le ataron fuegos artificiales. Afortunadamente, Indy se ha logrado recuperar poco a poco de sus heridas y su agresor, Carlos Efraín Duarte ha sido condenado a 2 años de cárcel.
Carlos Duarte ató fuegos artificiales al cuerpo de Indy y luego se fue en su camioneta, abandonando al pobre perro a su suerte.
Afortunadamente, Indy fue encontrado por un hombre y llevado rápidamente a una clínica veterinaria.
Después de haber encontrado al culpable, la gente pedía que se hiciera justicia.
Fue gracias a la descripción de algunos testigos y a varias cámaras de seguridad que pudieron identificar al agresor.
Duarte fue condenado a 2 años de cárcel, a un año bajo libertad vigilada y deberá realizar 40 horas de trabajo en Caltrans.
Deberá asistir también, por un período mínimo de 52 horas, a una organización para alcohólicos.
También tiene prohibido poseer animales domésticos durante 10 años.
¡Qué bueno que Indy ya está mejor! Espero que de ahora en adelante su vida sea mucho más feliz.
(Fuente: schnauzi)
Afortunadamente en este caso se hizo justicia con aquel mal hombre que hizo ese tal acto brutal. Maltratar a un animal no es un juego, también son seres vivos, ¿o te gustaría que jugaran así contigo?
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